lunes, 28 de julio de 2014

SDCC, 5

1064.

Como siempre, hubo sobrecarga sensorial, conseguí artículos extraordinarios, me perdí de otros que era imposible conseguir, se me rompió el corazón por lo menos en una ocasión, me dí cuenta de que aún me puedo poner como fanboy de 15 (la culpa fue de Walt Simonson), estuve a punto de mandar los cómics al demonio, y al final, gracias a José Ladronn, volví inspirado. Y con esperanza.

La Comic-Con es despiadada. No puedo esperar a la próxima.

Eso es.

---

As always, there was sensory overload, I got some extraordinary articles, I lost many others impossible to get, I was heartbroken at least once, I realized I can still be a 15-year old fanboy ( Walt Simonson's fault), I was just about sending comics to hell, and, in the end, thanks to Jose Ladronn, I came back inspired. And with hope.

Comic-Con is ruthless. I can't wait to the next one.

So it is.

No hay comentarios:

Publicar un comentario